POEMA AL GRAL. FELIPE ANGELES

AL GENERAL FELIPE ÁNGELES





Por Nina Salguero

¡¡Salve Artillero inmortal !! , tu mirada
tranquila reflejaba, la nobleza que tu alma
perpetuaba, en tu sangre de héroes y de gloria.

Patriotismo y pureza reflejada
en tu afán por instaurar la democracia,
pero la bestia herida de la envidia
rodeaba tu existencia temeraria.

Era tanta la luz que emanabas
que el traidor tuvo miedo a tu presencia,
Pegaso místico, mi Artillero mexicano.
Galopando en los cielos de la historia.

Traicionado en el Cerro de La Mora,
fué tu Gólgota... Iscariotes y Pilatos te rodeaban
fue tu muerte tu gloria, ejecutando sentencia
Pelotón: ¡ Preparen, apunten, fuego!
Al corazón pediste que apuntaran
para apagar de tu pasión el fuego
de la patria que tu amabas.

“ A hombres como yo se les dispara al corazón,
no a la cabeza”.

Y plasmaste tu lealtad de puño y letra...
“ Mi muerte hará más bien
a la causa democrática
que todas las gestiones de mi vida,
La sangre de los mártires fecundiza
las buenas causas”.

Madero fue el Apóstol de una causa,
Y Villa es un Santo en los altares,
Sabe Dios que en la huasteca temeraria
eres Arcángel, conciliador que calma tempestades.

Los fusiles apuntaron a tu pecho,
degradado por Huerta y por la escoria,
por cada estrella que la canalla disfrutara
arrancando del kepí, tu propia historia,
Dios te otorgó las estrellas de los cielos
y el manto de la gloria.


Cuentan que aquel Pelotón
que acabara con tu vida,
nunca logró borrar
de su memoria, la herida....

A la hora de tu muerte
una extensa nube negra
cubrió el cielo en la hidalguense huasteca,
eran los tordos llorando
por el héroe de su tierra.

Salve inmortal Artillero,
como herencia sublime nos dejaste
el amor a la verdad,
El linaje inconfundible a la palabra
y el supremo valor de la lealtad.



























































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