LA CIUDAD DE MÉXICO DEL SIGLO XIX EN GOOGLE STREET VIEW
La Ciudad de México del siglo XIX en Google Street View
by CiudadanosEnRedEl 25 de febrero de este año apareció en el diario The Guardian un trabajo extraordinario que inmediatamente llamó la atención de muchos. Halley Docherty tomó pinturas de los siglos XVIII y XIX de Londres y las colocó en la aplicación Google Street View, como si esas imágenes fueran las mismas que el automóvil de Google captó con su cámara en uno de sus incansables recorridos. El proyecto se ha convertido en una serie de entregas mensuales en las que lo mismo retoma fotografías de la Segunda Guerra Mundial, que portadas de álbumes famosos.
Tomando su idea y específicamente a sugerencia de Héctor de Mauleón es que comencé a replicar su trabajo pero para el contexto mexicano. Es así que con ésta, arranca una serie de entregas con fotografías y pinturas que tal vez Docherty nunca empleará pero que a tantos nos gustaría ver.
En esta ocasión el tema de las siguientes imágenes es el siglo XIX en la Ciudad de México. El material son pinturas, grabados y litografías famosas de la capital del país, siempre con la restricción de que éstas pudieran ser colocadas de alguna manera en Google Street View. Es decir, el trabajo no consiste en replicar una imagen antigua desde el mismo punto de vista para luego amalgamarlas, sino buscar localizar el sitio retratado antiguamente en las fotografías de Google. Si esta empresa ha conseguido geolocalizar la vista de una buena parte de las vías públicas del planeta, no deja de resultar incluso un poco punzante, impregnar en esas imágenes las cicatrices históricas, las miradas estéticas o la simple memoria sensible que el automóvil de Google no logra retratar al pasar con su cámara esférica. Esta restricción, desde luego, excluye un gran número de interesantes, importantes y famosas imágenes que simplemente no embonan por cuestión de perspectiva o no están disponibles en Google Street View.
Sin más, dejo las imágenes trabajadas para esta primera entrega. En las próximas se abordarán otros lugares de México, otros momentos históricos y otras técnicas fotográficas o pictóricas.
Entrada triunfal del Ejército Trigarante a la Ciudad de México en 1821, Theubet de Beauchamp (1827). Entre autos de una fotografía previa a su peatonalización, Agustín de Iturbide y el ejército independentista, entran a la ciudad por la calle de San Francisco (hoy Madero). La comitiva avanza a un lado de la extinta Capilla de la Tercera Orden y de la Casa de los Azulejos.
La plaza de la Ciudad de México el 27 de octubre de 1821, Anónimo. Siglo XIX. (Imagen tomada del libro: Guadalupe Jiménez Codinach, México. Su tiempo de nacer. 1750-1821, México, Avantel/Banamex, 2001, p. 260). Del mismo día que la imagen anterior, la fiesta por la proclamación de la Independencia de México llegó al Zócalo. En ese entonces la mitad de la plaza estaba ocupada por el mercado del Parián por lo que la concurrencia se aglomeró en el lado oriental. En la pintura aún se observa el marco de la plazoleta oval que hasta un año antes de este acontecimiento albergaba la escultura de Carlos IV. Para estas fechas, la estatua del Caballito ya había sido resguardada en el patio de la Universidad de México.
La Villa de Guadalupe. Ilustración de Emily Elizabeth Swinburne para Mexico in 1827, de Henry George Ward (1828). La litografía como método de reproducción de imágenes se introdujo a México en la década de 1820. Sin embargo, de las primeras ilustraciones litografiadas sobre temas mexicanos se hicieron en Inglaterra, tras el viaje de Henry George Ward a México a inspeccionar la vida (y particularmente la industria minera) de la nación recién independizada. Su pareja, Swinburne, se encargó de las ilustraciones.
La calle de San Andrés (hoy Tacuba) y el Palacio de Minería. Ilustración de Pietro Gualdi en Monumentos de Méjico: tomados del natural y litografiados por Pedro Gualdi (1841). El auge de la litografía en México comienza con Gualdi, quien incluso genera escuela en la Academia de San Carlos, siendo profesor de uno de los más reconocidos pintores de ilustraciones litográficas, Casmiro Castro. Gualdi tuvo una particular fascinación por el Palacio de Minería y a él debemos también la ilustración de algunos interiores hoy inexistentes (como la Universidad de México) o modificados (como la Catedral).
Salto del Agua. Ilustración de Casimiro Castro en México y sus alrededores: colección de monumentos trajes y paisajes (1856). En la década de 1850 apareció la colección de ilustraciones litográficas más entrañable de todo el siglo. De las 42 láminas, Casimiro Castro, alumno de Pietro Gualdi, fue autor de de la mayoría. Aquí se muestra la icónica fuente del final del acueducto de Chapultepec, obra de Ignacio Castera en el siglo XVIII. La que vemos hoy es una réplica, pues la original, arruinada por los años y la Revolución Mexicana, fue llevada al Museo Nacional del Virreinato en Tepotzotlán.
Capillas de Aránzazu y Balvanera del convento de San Francisco. Ilustración de Casimiro Castro enMéxico y sus alrededores (1856). El trabajo de Castro y los otros ilustradores no sólo brindó imágenes pintorescas sobre la Ciudad de México del siglo XIX, sino también permiten dar cuenta de lo mucho que se ha perdido. En esta litografía podemos ver, donde se encontraría hoy el templo de San Felipe de Jesús, la portada principal de la capilla de Aránzazu (izquierda). La portada de la capilla de Guadalupe (antes de la Balvanera o Valvanera) conservaba aún sus relieves y esculturas de bulto. Irónicamente la destrucción del convento de San Francisco comenzó el mismo año que México y sus alrededores fue publicado.
Trajes mexicanos. Casimiro Castro en México y sus alredores (1856). El trabajo de amalgamar una ilustración con una fotografía de Google Street View a veces requiere fragmentar el dibujo y descomponer la perspectiva. Fue el caso de esta litografía sobre el palacio de los condes de San Mateo de Valparaíso y marqueses de Jaral de Berrio en la esquina de Espíritu Santo (Isabel la Católica) y Capuchinas (Venustiano Carranza). La composición de la imagen no permite apreciarlo, pero en ese entonces el soberbio edificio de Francisco de Guerrero y Torres tenía tres niveles. Fue cuando Banamex lo adquirió en la década de 1880 que se unieron las primeras dos plantas.
Paseo de las cadenas en una noche de luna, ilustración de G. Rodríguez en México y sus alrededores(1856). Una de las ilustraciones más enigmáticas de la colección de Castro et al muestra una escena nocturna. La litografía no lo distingue bien, pero al frente de la Catedral se había colocado en el siglo XIX un paseo arbolado delimitado por pequeños postes unidos por cadenas. La plaza, ha sufrido numerosas remodelaciones a lo largo de todo el siglo siguiente. Sin embargo, estas cadenas pueden apreciarse aún decorando la actual plaza de Santa Catarina en las esquinas de República de Brasil y Honduras.
Plazuela de Guardiola. Ilustración de Casimiro Castro y Juan Campillo en México y sus alrededores(1856). Al encabezar los menús de la cadena Sanborn’s en todo el país, esta debe ser la ilustración del siglo XIX mexicano más conocida de todas. Sólo el palacete antaño de los condes del Valle de Orizaba y conocido como la Casa de los Azulejos subsiste en el paisaje de esta populosísima plazuela.
Plaza de Santo Domingo. A. Gallice en Álbum Mexicano (1885). Manuel Toussaint desdeña esta colección de ilustraciones litografiadas de México como una sombra de lo que fue México y sus alrededores. Esta imagen, sin embargo, es muy interesante pues muestra una efímera intervención que se llevó a cabo en el Palacio de la Inquisición (a la derecha dentro de la ilustración) en 1879 a cargo de Luis G. Anzorena, cuando le agregó una tercera planta, misma que fue eliminada en restauraciones del edificio unas décadas después.
Fuente: José Ignacio Lanzagorta García | Cultura - Nexos
Politólogo y antropólogo social
@jicito
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