EL SONORENSE ¿, EL NUEVO ANTROPHOS

Por Víctor Manuel Estupiñán Munguía*

“Es un hecho: vamos bien, vamos muy bien”

Gobierno de Sonora

Que mejor que esta fecha 14 de noviembre que se dedica a la concientización de la enfermedad de la diabetes y, que el día 12 de este mismo mes, a la obesidad y sobrepeso; para analizar una de las epidemias más temibles de la humanidad. Misma que generalmente se encuentra encadenada al sobrepeso y a la obesidad, sin embargo, las nuevas generaciones pueden ser delgadas y, padecer diabetes debido a la genética.

Ahora bien, entrando en materia, mientras que la mercadotecnia política oficial nos satura cotidianamente con la “plegaria” arriba señalada de que “Es un hecho: vamos bien, vamos muy bien”, por otro lado, el Subsecretario de Servicios de Salud del Estado de Sonora, Gustavo López Caballero declaró en San Luis Río Colorado que:

“La obesidad se ha convertido en una verdadera epidemia en las comunidades de Sonora”.

Teniendo que reconocer que Sonora tiene el primer lugar en sobrepeso y obesidad a nivel nacional. ¿Pero esto qué implica? ¿Cómo impacta?

El sobrepeso y la obesidad  se definen según la Organización Mundial de la Salud como la acumulación anormal y, excesiva de grasa que es perjudicial para la salud, debido a las dietas altas en energías, escasa en fibras y, en actividades  físicas.

De Sonora para el mundo: el nuevo antrophos

El problema es que se dispara a otros ámbitos muy serios. Ya que debemos considerar que a México se le ha reconocido que tiene el primer lugar en sobrepeso y obesidad a nivel mundial y, si Sonora es líder nacional, lógicamente ello implica que ¡Sonora ocupa el primerísimo lugar en obesidad y sobrepeso en todo el globo!

Y, muy posiblemente también en diabetes. Como quien dice, “la mera mera” cuna del nuevo antropohos mundial.

Sabemos que la Antropología en términos generales estudia al hombre en su contexto social, cultural y físico; así como su desarrollo, cambios físicos, conductuales y, las diferencias de los distintos pueblos.

Ahora bien, más allá de las distintas definiciones de “hombre”, “animal racional” u, homo (humus, “nacido de la tierra”), incluso, “bípedo implume”, que por cierto todas ellas ocupan un lugar clásico; también más allá de la que define la palabra griega “anthropos”, “el que mira hacia arriba” o, “examina lo que ha visto”; en ellas el complemento sumamente importante es, lo racional.

Así como la capacidad de la  palabra y el pensamiento, sin las cuales quedaría en las tinieblas animalescas.

Sin embargo, toda esta cultura de lo “racional” se ha puesto en entredicho ante el gran bombardeo de los medios de comunicación en contubernio y, en complacencia con el Estado. En este caso, concretamente para enloquecer a los sonorenses y, así obligarnos a consumir comida chatarra o, comida basura sin precedentes en toda la historia regional.

Pero lo mismo ha venido sucediendo con el consumo de la cerveza, puesto que recordemos que Sonora sigue ocupando el  primer lugar, después de mantenerlo constantemente durante muchas décadas.

Lo mismo podemos decir de los refrescos embotellados, sobre todo de las “colas”, las cuales son profundamente adictivas y nocivas.

Por otra parte, anteriormente, las mutaciones de fondo eran consideradas más o menos tardadas, las cuales requerían por lo menos algunas centurias y, procesos muy marcados históricamente hablando.

Sin embargo hoy, en los sonorenses se han acelerado, puesto que sólo ha bastado de la década de los 90 a la fecha, es decir, unos 25 años para comprobar la existencia de otro tipo de con-regional totalmente diferente. Es decir, en cuanto a su constitución física y, funcionamiento psicológico.

Misma cultura que ha ocasionado una verdadera epidemia de sonorenses con sobrepeso, obesidad, hipertensión, diabetes, colesterol, gota, pérdidas de extremidades, infartos y muertes, así como sufrimientos familiares al por mayor.

Recuerdo que ya desde 1999, en la publicación de mi libro “Los Sonorenses y su identidad cultural”, incluí alertamente unas gráficas comparativas sobre los niveles de colesterol de los norteamericanos y de los propios sonorenses, donde se nota claramente que desde entonces ya nos encontrábamos peligrosa y, mortalmente por encima de los niveles de ellos, los cuales tienen gran fama de consumistas chatarreros.

Así mismo con la misma intención, incluí tablas de las principales enfermedades y causas de muerte de los sonorenses (diabetes, colesterol, gota, triglicéridos, hipertensión, ataques coronarias, entre otras). Es decir, “el perfil de muerte cultural”, que por cierto, desde entonces ya se encontraba bien dibujada. De nada sirvió.

Sin embargo, las diferentes autoridades priistas y panistas que desde entonces se han constituidos, nada efectivo han realizado. La verdad es que les han importado muy poco velar por la salud social de los sonorenses; concretizándose como siempre a dar declaraciones demagógicas, sólo “para salir del paso”.

Es decir, declaraciones pertenecientes a la política inmediatista que tanto daño nos ha provocado a todos. Así como ciertas medidas desarticuladas, mismas que desde que nacen, ya portan la condena al más rotundo fracaso.

Desgraciadamente  la actual realidad nos concede la razón, con la comprobación y aparición del nuevo antrophos sonorense, mismo que lidera a nivel nacional y, también mundialmente, he aquí:

“El IMSS confirma que nuestra entidad ocupa el primer lugar nacional en sobrepeso y obesidad infantil, y de permanecer esa tendencia, en 10 años mas el 80 por ciento de los adultos será obeso o con sobrepeso.” Kiosco mayor

No me cansaré de decirlo que nada es más valioso que la salud misma, ni todo el dinero del mundo pude comprar la salud; se tiene o se carece de ella, las razones pueden ser múltiples.

Es por ello que ninguna obra material como puentes, ni estadio magno-multimillonario, ni inversiones en minería, ni acueductos, carreteras, obras hidráulicas, “ni nada de nada”; se le puede comparar con la importantísima salud del pueblo sonorense. 

Lo más importante del ser humano es su integridad vital de su salud, tanto física como psíquicamente. Sin embargo, sobre todo en Sonora esta condición es incumplida y, en su lugar se ha institucionalizado la pandemia de la obesidad y sobrepeso, junto con todas sus mortales consecuencias.

Pandemia que se ha anidado gracias a que en Sonora existe contemplación benevolente contra las trasnacionales y, las que elaboran y venden  “comida basura” o “chatarra” o, lo que es lo mismo, “haciéndose de la vista gorda”, así como de ausencias de políticas públicas efectivas contra las condiciones generativas de la misma epidemia.

Por ejemplo, la Comisión de Salud del H. Congreso de Sonora fue contactada por el Secretario de Salud, José Jesús Bernardo Campillo García, con el objetivo de crear una ley para la prevención y combate de la obesidad, sobrepeso y la pésima alimentación de los sonorenses, a lo que el Secretario de Salud declaró:

“Esta propuesta de ley la vemos con mucho agrado porque la obesidad y el sobrepeso están con nosotros los sonorenses desde hace décadas”

¿Entonces por qué es hasta ahora que se trata de actuar contra ellas?

La ley por la ley no garantiza absolutamente nada, cuando existe la cultura del disimulo y la negociación (corrupción) debajo de la mesa.

Los datos son escalofriantes, he aquí algunos muy reveladores:

De cada 10 sonorenses que mueren, 7 padecen diabetes, hipertensión y sobrepeso. Lo anterior se ha demostrado con las respectivas autopsias, donde el páncreas, arterias, corazón, ojos, riñones, pies, etc. se encuentran muy lesionados.

Se ha dicho que el 25% de los niños entre 6 y 9 años padecen sobrepeso y obesidad, sin embargo, en Sonora el porcentaje es mucho mayor.

Los nuevos antrophos sonorenses que nacen ya vienen predestinados a padecer diabetes, sobrepeso y obesidad y, el infierno que ello implica. Por ejemplo, hasta hace poco tiempo la media nacional al nacer era de 2.8 kilogramos, en Sonora los nuevos antrophos nacen ¡hasta de  6 kilos o más!

Así mismo actualmente abundan los que pesan más de 4 kilos.

Ya de adultos, por ejemplo, he conocido varios sonorenses que han pesado muy cerca de los 300 kilos (285 kilos). Pero lógicamente que existen muchos más que pesan 120, 140, 160, 180, 200, 220, etc.  

Lo anterior adquiere significado catastrófico si consideramos que de acuerdo con datos arrojados por la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición de 2012, el 70% de la población mexicana padece sobrepeso y obesidad

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Por desgracia, Sonora ocupa el primer lugar entre los estados fronterizos. Se calcula que más de la mitad de las muertes en Sonora están relacionadas con la obesidad.

Sin embargo, lejos de considerar dicho problema como cosa de seguridad pública, es decir, de Estado, se sigue fomentando la cultura de la obesidad, sobrepeso y, diabetes.

Por ejemplo, la “ley churro maíz” un fracaso, los permisos para apertura de expendios disfrazados de abarrotes, ultramarinos, depósitos, etc., van “de viento en popa”.

Los datos negros sobre la salud de los sonorenses se entrecruzan, el IMSS declaró que nuestro Estado ocupa el primer lugar nacional en sobrepeso y obesidad infantil, por lo que de permanecer dicha tendencia, en 10 años, el 80 % de los adultos será obeso, con sobrepeso. Y, lo más probable, con diabetes.

Desgraciadamente, en Sonora, uno de cada tres niños menores de 12 años padece sobrepeso y, obesidad. La hipertensión y la diabetes se han disparado como consecuencia directa y, las muertes del corazón (causa número uno), están directamente relacionadas con el sobrepeso.

Qué tristeza que a más de las crisis de pobreza, violencia, corrupción, desempleo, injusticias, impunidad, estado fallido;  Sonora “aporte” y encabece  para el mundo, el nuevo antrophos …

* Víctor M. Estupiñán Munguía: Pensador por distracción Cósmica, contador de estrellas por insomnio creativo, pintor de sueños por terapia humanista, especialista en transgredir las reglas ortográficas de la Real Academia Española, con neurosis cultural debido a que no puedo crear poemas que lleguen al corazón, víctima de la libertad, democracia y ecocidio del capitalismo bárbaro, pero con licencia de la Madre Naturaleza para cortar flores y olerlas.- haa y encaminador de almas! 

Miembro de S.I.P.E.A. (Sociedad Internacional de Poetas, Escritores y Artistas)- Sonora- “Por la paz del mundo”           victor-79@live.com.mx