INSUFICIENTE LA LEY DE VÍCTIMAS

EN CONTRASTE

Oscar Coria Reyes

 

El Congreso de la Unión publico este miércoles en el diario oficial de la federación el decreto que reconoce y garantiza los derechos de las víctimas del delito y de violaciones a derechos humanos.

Una ley que viene a tratar de conciliar la relación existente entre las autoridades y las víctimas y familiares de estos, por las penurias y situaciones vividas durante el suceso que les cambio la vida, sin embargo,  dicha ley aún sigue siendo insuficiente, en virtud de que dentro de la misma no se contempla un mecanismo claro por medio del cual resarcir el “daño” causado, de entrada porque no existe un presupuesto asignado para el efecto y porque todo presupuesto que su destinar a la aplicación de dicha ley será insuficiente.

Si bien, el objetivo y fin de esta nueva legislación es justo, algunos de los principales promotores de la misma ya han salido a decir que esta ley es insuficiente como en el caso de Las organizaciones México SOS, que dirige Alejandro Martí y Alto al Secuestro, de Isabel Miranda de Wallace, señalaron “diversas debilidades y vacíos” en la Ley General de Víctimas promulgada por el presidente Enrique Peña Nieto.

En un comunicado, la asociación que preside Wallace plantea que la Ley General de Víctimas no responde a las necesidades de todas las víctimas y sus familiares. “Nos preocupa que además de que la ley es inconstitucional y se publica así, no cuente con recursos económicos para las víctimas. Se crea burocracia y provoca la revictimización, por eso hacemos un llamado urgente a las cámaras a corregir esta ley y anticipamos que en breve estaremos presentando la nueva iniciativa”.

Así como ellos, cuando se lee detenidamente la ley que entro en vigor, se pueden ver de entrada diversos vacíos legales entre los cuales podemos señalar de entrada que no se contempla un presupuesto, así como cuál va a ser la participación de la sociedad civil a través del consejo que se crea, además de que no prevé de manera clara y precisa lo concerniente a que instituciones son las obligadas a solventar la reparación de daño, ni los montos, formas de pago y procedimientos.

Por lo anterior es que vemos que esta Ley de Victimas que tiene a bien rescatar Enrique Peña Nieto, después de retirar la controversia constitucional de Felipe Calderón,  trata de mitigar un poco el dolor y resarcir el daño hecho a quienes fueron objeto del delito, sin embargo aún tendrá que detallarse algunos temas y situaciones para que sea realmente efectiva y que no queda tan solo en papel.

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