IDENTIFICA A SU HIJITA FALLECIDA EN ACCIDENTE CARRETERO

 

Por Nina Salguero

El cuerpecito no identificado de una niña, esperaba por sus familiares… solo Dios sabe porque la dejó más días entre los vivos; quizá para que no olvidemos que la muerte llega sin respetar edades, no clases sociales.

En una nota de Edgar Escamilla desde Poza Rica, Ver.  se da a conocer el drama del padre de la criatura  de nombre Rubén Isidoro Antele, quien no solo perdió a su hija sino también a su compañera, a su esposa, dejando en la orfandad a dos hijos, la familia hoy fracturada por la mano del destino vivían en la comunidad de Zapotal, perteneciente al municipio de Santiago Tuxtla, Ver.

 

 

El portal El Fígaro, procedió a enviar la fotografía de la menor sin identificar pidiendo que todos los medios de la región  coadyuvaran en este acto solidario. Yo no sabía como se llamaba, le bauticé como María José, su nombre real era el de Maria Magdalena Isidoro Alvarado;     como el de aquella discípula de Jesús el Cristo.

Rubén, recorrió muchos lugares del Norte de Veracruz hasta dar con los restos de uno de sus seres amados, el cuerpo narra Edgar Escamilla, fue identificado por la abuela de la menor, la señora Angelina Antele Hernández y su padre, Rubén Isidoro Antele de 36 años y oficio campesino en la comunidad de Zapotal, municipio de Santiago Tuxtla de donde era originaria la familia.

Esther Alvarado Charmín de 32 años, viajaba rumbo a  Nuevo Laredo, Tamaulipas acompañada de su hermano Antonino Tomen y su pequeña hija María Magdalena; ocupaban los asientos 26 y 27 del autobús de la línea Butrón, que se impactara de frente con el remolque de un tráiler que transportaba sorgo la madrugada del viernes 20 de abril de 2012.

 

El padre supo del accidente ese mismo día y con el alma destrozada viajó hasta lograr sus objetivos, de acuerdo a la nota no le permitían ver fisicamente los cuerpos sino solo por fotografía  expresando: ASI EN FOTO NO ES LO MISMO , una orden de Jalapa, Ver. cambió todo el panorama Una vez que pudo ver de cerca el cuerpo de la menor reconoció en ella a su hijita por la señas particulares que los familiares conocen : un lunar en la mejilla y una cicatriz en la rodilla, el color de sus uñitas.

Identificada su hijita  en el Ministerio Público de Poza Rica, el campesino se trasladó  a la ciudad de Tuxpan para tratar de identificar  el cuerpo de su esposa Esther Alvarado una vez que le permitieron acercarse y no solo por fotografía.

“Me siento un poco más tranquilo porque ya encontré un cuerpo y ahora voy por el otro. Hasta no recuperarlo para darle sepultura. Sería difícil venir y que no encontrara nada, llegar sin el cuerpo” dijo.

Aunque extraoficialmente se sabe que el cuerpo que se encuentra en EL SEMEFO no corresponde a la esposa de Rubén.

Como todos sabemos, las autoridades estatales y municipales al igual que las personas piadosas  se prodigaron, la solidaridad fue impresionante, en Tuxpan se alumbró el camino de los difuntos, como en el DIA DEL NIÑO PERDIDO, la niña sin identificar fue encontrada por María y José, era mi idea, Tuxpan no solo preserva la tradición del 7 de Diciembre sino que la llama votiva que vive en cada uno de los habitantes de Tuxpan, creo la  luz que alumbró el camino de Rubén, para dar con su hijita, ella ya descansa en paz.

Agradecido espera que las autoridades le apoyen para poder trasladar el cuerpo de su hijita, esperamos que los asesores jurídicos lo contacten con la empresa ESMAR S.,A.DE C.V. para que lo indemnicen, la niña  cumpliría sus 10 años el próximo 8 de octubre, dijo el padre.

 

con información de Edgar Escamilla de Veracruzanos Info