AL ESTILO MATHEY

La Lámpara de Aladino


Gustavo Cadena Mathey

Buen día lector

Dicen que qué bonito es lo bonito, sobre todo en domingo.

Y también cuando se reviven acontecimientos lejanos que marcan la vida, mejor.

Claro, cuando esas vivencias han sido positivas.

Este domingo me desperté poco más tarde de lo usual, (cual debe) y en automático encendí el televisor.

Encontré una película de los tiempos de la esclavitud en Norteamérica.

Qué terrible experiencia describe sobre las personas que nacieron con el color diferente al de los que tenían el poder. Qué tristeza, qué crueldad, pero también qué ejemplos de valor, de fe y de entereza nos dejaron aquellos “negritos y negritas” que a pesar de todo nos legaron el jazz como cachetada con guante blanco.

Se trata de la vida de la joven Enriqueta Delille, fundadora de la Congregación con sede en Louisiana, de las Hermanas de la Sagrada Familia. Una mujer libre de origen africano que comenzó la congregación afro-americana en 1842 con el objetivo de educar a los hijos de esclavos y el cuidado de los enfermos, pobres y ancianos.

Esta orden religiosa trascendió los tiempos y actualmente lleva a cabo la misión original de la fundadora de dar atención educativa a jóvenes en más de 20 instituciones de los Estados Unidos y que ofrecen atención y refugio para las personas mayores.

Pues bien acabada esta gran historia de entre tantas que hay en la vida que nos ayudan a hacer de cuenta que hoy en día podemos hacer el bien a pesar de nuestros flagelos modernos, me metí a la computadora a buscar su historia y a disfrutar un poco de jazz.

Pero buscando jazz encontré danzón. Y como en mis tiempos de la adolescencia “el feo que toca sabroso”, Mariano Mercerón me volvió a conquistar con “Ven y Ven y Ven”, “Juárez”, “Florecita”, “Almendra”, y mi mente irremediablemente voló a la casa paterna de acayucan.

En el “Google” y en “You Tube” está todo. Allí está la puerta al pasado. Como por arte de magia, es como tener allí atrapado al propio Aladino para que te conceda escuchar la música de tu infancia y de todas las épocas, incluso hasta el video de los grupos y orquestas de antaño como “Los Churumbeles de España” o “La Violetera”, ¿se acuerdan? , algo espectacular que el lector debe disfrutar si no lo ha hecho.

Ya para completar los recuerdos, al checar los periódicos encontré en la columna de Víctor Murguía con la novedad de que el doctor Hugo Azamar Espejel de nueva cuenta es director de la clínica del Issste en Xalapa.

Víctor señala que en poco tiempo ha mejorado el servicio que presta ese nosocomio y que así lo reconocen los derechohabientes. Destaca que Azamar no sólo es un profesional de la medicina sino que sabe cómo manejar un hospital. Yo le puedo agregar que en Acayucan el padre de Azamar Espejel, don Hugo Azamar Muñoz fue compadre de mi papá y el sacamuelas al que siempre temimos pero que siempre nos atendió con afecto y cariño y nos ayudó a salir adelante. Allá en nuestro pueblo dejó una grata imagen de bonhomía y profesionalismo.

No siempre se aburre uno en domingo, inténtelo y verá.

Es más quien poseea esta tecnología no necesita salir a los antros, en casita se puede pasar una buena velada de fin de semana con este maravillosos aparato, incluso organizar su fiesta a domicilio.

ESCAPARATE

Pues hay un diputado que parece que tiene ganas de hacer una buena labor. Me refiero al diputado local Tomás López Landero, quien ya organizó en Zongolica una reunión de trabajo para dar a conocer las reglas de operación de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) a la población del distrito XVIII. Por lo pronto se espera que les lleven buenos proyectos de trabajo. A ver si es cierto y a ver si se apoya el trabajo de aquella gente que tanto necesita recursos+++

gustavocadenamathey@hotmail.com

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