RESPONSABILIDAD SOCIAL

 

ENVIADO A LA REDACCIÓN

1.- Los Empresarios juegan un papel importante en la sociedad dijo el Papa Juan Pablo II cuando visitó Durango en 1990. Además dijo “que nuestras acciones y decisiones pueden llegar mucho más allá de nuestro ámbito de trabajo. Además nos señaló que la riqueza tiene una hipoteca social y que como tal debemos pagarla. Este pago debemos realizarlo a través del servicio al bien común, de la disponibilidad para ayudar a los demás, la cual debe ir más allá de las urgencias ocasionales: una disponibilidad constante, que sea la forma de concebir la propia función de empresario, un estilo que marque nuestro modo de hacer”.

Sin duda todos creemos en la importancia de la participación de los empresarios. Estoy por eso seguro de que hoy en día, todas nuestras empresas, aún las más pequeñas, pueden participar directamente en los distintos proyectos que se han manifestado para reducir la pobreza de nuestro país.

Oí decir que existe desde hace unos años una organización que lleva el nombre de FUNDEMEX y que va creciendo porque estamos convencidos de que unidos alcanzaremos la prosperidad de todos los mexicanos en estos momentos difíciles y de retos. Sabemos que Fundemex propone a todas las empresas sin importar su tamaño o situación unirse a este movimiento empresarial, para que las aportaciones signifiquen una nueva forma de responsabilidad social.

Sabemos que la pobreza existe en todo el territorio nacional. En algunos estados la pobreza está más acentuada que en otros. Por eso debemos realizar acciones en toda la patria para que de forma equitativa se puedan instrumentar proyectos que impacten a personas, familias y comunidades de nuestra sociedad. Por eso quiero en este articulo felicitar a la Fundación del Empresariado en Mexico, A.C. (Fundemex) para que siga con su obra de desarrollo social y económico de las comunidades pobres de México a través del trabajo conjunto de las empresas y de las organizaciones de la sociedad civil.

2.- Además de la pobreza debemos combatir la inseguridad. Ese sería un gran paso si se lograra quitar la inseguridad que reina en nuestra patria. La Secretaria de Seguridad Pública se compromete a promover la creación de un observatorio ciudadano participativo de los distintos sectores de la sociedad y que incluyan a estudiosos del tema de seguridad pública y de la justicia, contando así con reconocimiento y liderazgo social.

Yo sé que las dependencias del gobierno no gozan de confianza ni de autoridad moral para organizar a la sociedad. La participación ciudadana debe ser espontanea y libre de intereses políticos. Por decreto no se hacen las cosas, sino que se requiere diseñar los instrumentos y llevarlos a cabo para la trasformación de la sociedad.

De hecho, he oído decir que la mitad de los policías no son confiables, por eso se confirma que aun no contamos con las bases para combatir la inseguridad. Debe de conformarse un frene cívico en contra de la inseguridad. Dicho frente debe de estar integrado por universidades públicas y privadas de prestigio, por organismos nacionales para la seguridad, por asociaciones sociales y por especialistas en esas áreas. Dicho frente debe supervisar las políticas de seguridad pública, y sus decisiones deben ser resultado de análisis objetivos y avalados por la mayoría de votos.

Sin duda este frente civil debe conformarse a nivel nacional, estatal y municipal. Esta es una proposición que yo puedo hacer, pero que no estoy seguro si se llevará a cabo; lamento sin embargo la falta de seguridad que hay en nuestra patria.

Sé que el estado de Chihuahua ha sufrido más que otros. Recordemos que debemos realizar todas las actividades en diferentes grados para obtener una sociedad más segura y que podamos vivir sin sobresaltos y violencia.

Finalmente, no olvidemos que estos anti - valores son fruto del mal; de la libertad dada por Dios al hombre, pero mal empleada; también es fruto de la falta de práctica de los valores y del olvido de Dios por parte del hombre.

Tenemos el caso de la llamada “familia” en Michoacán y la proliferación de los narcos en varios lugares e instituciones. Unámonos todos a las acciones buenas que se emprendan para que tengamos una sociedad más justa, más estable y más alejada de la violencia y que gocemos todos de una paz estable, con Cristo reinando en nuestro corazón. Ese es mi deseo de corazón.

+ Carlos Quintero Arce
Arzobispo Emérito de Hermosillo