Es un rancho abandonado pero la Sedesol informa que existen diez beneficiarios del programa alimentario…
¡¡ CORRUPCIÓN !!
GUILLERMO BASURTO ORIGEL
El Programa Alimentario (PAL) a cargo de Diconsa tiene el propósito de impulsar y fortalecer las capacidades básicas de las familias, en los hogares rurales en situación de pobreza, incrementando la ingesta diaria de alimentos mediante el otorgamiento de apoyos en especie o en efectivo sin costo alguno a los hogares beneficiarios.
Es un Programa, sujeto a los criterios establecidos por la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL), para apoyar a la población más marginada de nuestra sociedad, aquellos que habitan en lugares remotos y que carecen de las mínimas condiciones de vida. Los más pobres dentro de los pobres de México.
A diferencia de otros programas del Gobierno Federal, a las familias beneficiarias se les otorga una tarjeta asociada a una cuenta bancaria, en la que se les deposita bimestralmente la cantidad de $770.00
El padrón de beneficiarios, en cada ciudad, congregación y rancho, se puede bajar de internet, en la página www.sedesol.gob.mx, siguiendo el link de beneficiarios.
La ubicación exacta de los ranchos y congregaciones, en cada municipio, se puede bajar, de la página construida por Google, con datos proporcionados por INEGI: www.mexico.pueblosamerica.com;
Así las cosas, nos damos a la tarea, en este ejercicio, de auditar el Padrón de Beneficiarios del Programa Alimentario, en el Rancho El Cocal, Municipio de Tuxpan, Veracruz, México.
No se omite observar, que en el municipio de Tuxpan, existen registrados DOS RANCHOS con el mismo nombre del Cocal, el primero ubicado sobre la playa, entre las congregaciones de Villa Mar-Chile Frío y la congregación Benito Juárez, lugar donde están ubicadas las Centrales Termoeléctricas de Ciclo Combinado, motivo del presente estudio de caso. El otro rancho, conocido en el municipio como El Cocal, se ubica cerca de la termoeléctrica Adolfo López Mateos, rancho al que posteriormente se le realizarán las evaluaciones correspondientes.
El Cocal, es un rancho que perteneció a la familia Huesca, del municipio de Vega de Alatorre, con una hermosa y pintoresca casa de madera, construida sobre una estructura de mampostería, para evitar el ingreso de alimañas, comunes en la región.
Como muchos ranchos del país, actualmente se encuentra en total abandono, deshabitado, refugio de coyotes y fantasmas. Un medidor de energía eléctrica, sin funcionar, vestigio que hace muchos años existió algún habitante.
En este rancho abandonado, la SEDESOL informa que existen 10 beneficiarios del Programa Alimentario: ALVAREZ RAMOS VICTORIA; BARTOLO ALMORA ISAÍAS; BETANCOURT HERNÁNDEZ LEOPOLDO; HERNÁNDEZ CRUZ IRMA; HERNÁNDEZ CRUZ JESÚS ISABEL; HERNANDEZ GUILLERMO RUBEN; PEREZ LÓPEZ ANGELINA, así como la familia integrada por la señora LUCIA OLMEDO GARCÍA (Madre), ROMERO SAÍNZ MARTÍN (Padre) y los menores hijos: Luis Alfredo y Raúl, de apellidos Romero Olmedo. Falso. Es un Rancho sin habitantes, desde hace varios años.
De todos los beneficiarios del Programa Alimentario consignados en el padrón de SEDESOL, solo se pudo localizar a la familia ROMERO-OLMEDO, en la vecina congregación de Benito Juárez.
Al interrogar a los lugareños sobre los nombres de los demás beneficiarios, coincidieron en sus respuestas: Jamás han vivido en el Cocal; No los conocemos; En mi vida había escuchado esos nombres.
Así las cosas, existe evidencia suficiente para presumir ilícitos de tipo administrativos, en contra de quien resulte responsable, tanto por el registro de nombres falsos, como por el uso indebido de las tarjetas bancarias.
Tarjetas con las cuales, se puede estar sustrayendo indebidamente el dinero de los pobres, destinatarios originales de este Programa Alimentario
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